Esta cocina de acabado en madera con sistema de apertura push se concibe como un escenario donde la arquitectura y el diseño dialogan con naturalidad. Las superficies de madera, amplias y continuas, envuelven el espacio con una presencia cálida y sólida.
Las grandes columnas en madera estructuran la estancia con un carácter rotundo y sofisticado. Su verticalidad ordena la composición y marca un ritmo sereno, mientras la ausencia de tiradores aporta una estética limpia y minimalista. El sistema push permite que la madera se exprese con total protagonismo, sin interrupciones, consolidando una imagen refinada y contemporánea.
La distribución, amplia y generosa, permite que la luz atraviese el ambiente con libertad.
Los ventanales bañan de claridad cada superficie, realzando la nobleza de los materiales y acentuando la armonía entre interior y exterior.
Es una cocina diseñada para destacar, donde la amplitud y la pureza formal se combinan para ofrecer una experiencia visual única.
