Diseñar una cocina implica tomar decisiones constantemente: distribución, color, acabados, tiradores, accesorios, revestimientos, electrodomésticos, suelos…
Puede parecer que lo complicado acaba cuando terminamos con todos los elementos que necesitan instalación porque “al menos, el resto son cosas que puedes cambiar fácilmente”. Y así es. Sin embargo, no por ello son más sencillas de elegir ni menos importantes para el resultado final.
Lámparas, sillas, mesas, cortinas y objetos de decoración son fundamentales no solo a la hora de generar un ambiente, sino que pueden hacernos pasar de una cocina bonita a una cocina impresionante.
En este artículo queremos centrarnos en las mesas de cocina, un elemento más complicado de elegir de lo que parece a priori, sobre todo en estancias de concepto abierto.
Te dejamos algunas ideas muy originales de nuestros distribuidores para que puedas inspirarte.
Vuelta a los básicos
Comenzamos con un básico entre los básicos: la mesa rectangular de madera. Sus grandes ventajas son:
- Atemporalidad. Llevamos viéndolas en nuestras cocinas y comedores desde que podemos recordar y todavía no nos hemos cansado de ellas.
- Resistencia. Menos mal que son atemporales, porque son muy duraderas y resistentes al estar fabricadas en madera maciza. El mantenimiento pasa simplemente por aplicar de tanto en tanto algún tratamiento protector.
- Versatilidad. Casan con casi cualquier estilo y son cómodas para cualquier actividad, no solo para sentarse a comer. ¿Quién no ha hecho las tareas, manualidades o labores de costura en una de estas?








